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Matías Piñeiro y sus chicas Shakespeare

 

El artificio Shakesperaino femenino de Hermia & Helena

por Qornelio Reyna

 

Matías Piñeiro es un director de origen argentino que desde principios de la década estudia, reside y trabaja en Nueva York y que desde entonces tiene un interesante proyecto de adaptar comedias shakesperianas de manera libre. Este cineasta ha sido premiado en festivales como el Festival de Cine de Locarno y se ha vuelto una de las figuras más prometedoras del cine independiente latinoamericano.

Ahora, su cuarta y más reciente entrega (aunque su obra ascienda ya a seis largometrajes y un mediometraje) titulada Hermia & Helena se presenta en salas mexicanas, siendo ésta la primera producción norteamericana que realiza.

 

F.I.L.M.E: ¿Qué nos puedes contar sobre Hermia & Helena?

Matías: Es la cuarta película de una serie de filmes que vengo realizando hace ya siete años que retoman y adaptan libremente textos de Shakespeare. Comencé con Rosalinda (2011), seguí con Viola (2012), La Princesa de Francia (2014) y ahora Hermia & Helena (2017) que retoma Sueño de una noche de verano y lo transporta a una historia sobre un par de mujeres que estudian de intercambio en Nueva York y de las cuales una aprovecha para hacer una serie de pendientes personales.

 

F: ¿Cómo surge el proyecto shakesperiano?

M: Surge de mi pasión, mi afición por las obras del bardo. Yo no soy una persona de teatro pero sí leo y asisto mucho al teatro y tengo muchos conocidos que se dedican a eso entonces acercándome a través de la lectura es que yo retomo principalmente sus comedias, porque todo mundo lee las tragedias pero las comedias no es muy común, entonces decidí enfocarme a eso.

 

F: ¿Cómo decides qué cosa retomar de esos textos y qué dejar fuera?

M: El proceso mediante el cuál seleccionó en realidad es bastante sencillo. Nunca me interesó adaptar tal cual las historias, traspasarlas del texto o el teatro al cine, buscaba una manera de retomar ciertas frases, momentos, situaciones o personajes y a partir de ahí dar rienda suelta al guión, a que fueran más libres e independientes del texto para que yo pudiera hablar más de lo que a mí me parece que quiero hablar.

F: En todas retomas a los personajes femeninos del bardo ¿por qué?

M: Me parecen más divertidos y ricos a la hora de escribir, también ayuda que las actrices con las que trabajo todas son personas que vienen del teatro entonces de alguna manera ya conocen la obra de Shakespeare y se les facilita trabajar de una manera más teatral, más lúdica a estos personajes. Al menos en las comedias los encuentro más interesantes, uno puede pensar que son personajes secundarios pero en realidad tienen una profundidad que no salta a simple vista y es lo que intento explorar.

 

F: En las cuatro películas hay una convivencia, mezcla o diálogo entre distintos medios, sea el cine, el teatro, la radio y ahora hay un asunto con la traducción y la literatura hablada, ¿cómo es que llegas a esa mezcla?

M: En realidad se trata de buscar maneras de entrarle a los textos como había dicho recién, sin tener que adaptarlos tal cual van ocurriendo y creo que introducir esos elementos que mencionas me permite hacer la referencia y además me permite jugar con los actores. Soy una persona a la que le gusta mucho el diálogo en la escena como parte de la narrativa así que con el teatro en Viola y la radio en La Princesa de Francia es como meto ese elemento que me gusta y me permite trabajar de distintas maneras con los actores que además muchos vienen del teatro.

 

F: Llevas cinco años residiendo en Nueva York ¿por qué hasta ahora te animas a hacer una película allá y en inglés?

M: Nunca había sentido la necesidad de experimentar acá. Llegué por la escuela, desde entonces resido acá y recién me ha dado la inquietud de hacer algo acá porque conocí a un gran grupo de personas con quien tengo amistad y con quien he aprendido a trabajar de una manera que me siento cómodo, entonces sentí que era un buen momento para empezar a hacer algo acá.

F: ¿Cuáles fueron las ventajas o desventajas de trabajar allá o de escribir/dirigir una cinta en otro idioma?

M: Acá he conocido una serie de personas, cinéfilos, actores, directores y productores que comparten mucho mis formas de trabajar, con menos dinero, con producciones pequeñas y entre amigos y me ha venido muy bien. Creo que hay más ventajas que desventajas. El inglés lo hablo desde hace tiempo y no me complicó mucho escribir el guión y a la hora de dirigir a gente como Mati Diop y Dan Sallit, que son dos grandes figuras del cine independiente, fue sencillo por su experiencia y a Agustina Muñoz con quien he colaborado casi toda mi carrera la seleccioné en el casting porque ella vivió por escuela en Holanda entonces entendía bien al personaje y además también se le facilita el inglés.

F: ¿Cómo fue trabajar una vez más con Agustina Muñoz ahora en el papel protagónico?

 

M: Bueno a ella la conocí hace años en Argentina y somos muy buenos amigos y nos tenemos mucha confianza y desde Viola (2013) ya habíamos logrado una manera de trabajar bastante cómoda, natural y libre donde a veces se presta a la improvisación y dejo que se apropien de los personajes y creo que Agustina ha sabido como trabajar dentro de este proyecto de una manera en la que yo me siento a gusto con su trabajo, claro, le tengo un cariño y un respeto considerable porque admiro mucho su trabajo y considero que fue una gran elección para el papel de Camila por lo que mencionaba hace rato de que ella tenía una fuerte identificación con el personaje.

 

F: ¿Cómo es el proceso de distribución con el que has trabajado hasta ahora?

M: Tiene mucho que ver con el hecho de que mis cintas son películas pequeñas, sencillas, entonces en realidad no me preocupa que se vean en todo el mundo, aunque claro me gustaría que se viera en más países, pero aprendí sobre la marcha a mover mi trabajo siempre entablando relaciones estrechas con la gente que me puede ayudar. En México aliados como [la distribuidora] Interior XII, la Cineteca Nacional, Cine Tonalá, FICUNAM, han sido aliados muy valiosos. Acá he conocido mucha gente que le interesa llevar mi trabajo a otras latitudes y desde luego que me da gusto, pero obvio hay países donde no se ha estrenado ninguna, pero como digo, todo ha sido muy personal, muy natural entonces no me molesta siempre que se vea en algunos lugares y la gente tenga oportunidad como ahora en México pues yo encantado.

 

F: En general ¿qué te ha dejado una carrera tan lejana a los éxitos comerciales, a las grandes producciones?

M: Primero que nada, la gente. Soy alguien a quien le gusta trabajar con las personas, eso siempre es lo más importante, el equipo con el que trabajo siempre son amigos o se vuelven mis amigos y de ellos aprendo mucho y eso es lo que más satisfacción me da, ni los premios ni los reconocimientos se sienten tan bien como trabajar con buenas personas. Después viene la libertad a la hora de escribir, de dirigir, me siento a gusto de decir lo que yo quiera o lo que me interesa y experimentar un poco con el lenguaje, con las temáticas o las narrativas.

 

F: ¿Habrá más cine shakesperiano en el futuro?

M: Sí, por lo pronto tengo un par, dos o tres trabajos más con Shakespeare y luego quizá haga otra cosa. No lo sé, hago las cosas en el momento en que siento que debo hacerlas, sin apresurarme ni presionarme, pero sí, quizá vengan un par más y ya luego veré qué pase o qué otra nueva obsesión toque a al puerta.

 

26.08.17

Qornelio Reyna


@Johnny_Mofeta
Comunicólogo en formación, cinéfilo de vocación con esperanzas de realizar estudios cinematográficos en alguna institución, en la calle, en las salas, afuera del Elektra viendo las películas del canal 9... donde sea.....ver perfil
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