La tercera edición del festival de cine Distrital se acerca. El proyecto, creado por Circo 2.12 AC en el 2010 como una propuesta de llevar la experiencia estética más allá de la pantalla mediante la creación de puentes entre el cine y otras artes, da inicio el 1º de junio. Hasta el 9 del mismo mes, el público mexicano podrá disfrutar de alrededor de 90 títulos de ficción y documental, nacionales e internacionales, que este año se estarán proyectando en cuatro sedes (Centro Cultural Universitario Tlatelolco, Cine Lido, IFAL y Cine Tonalá).
Distrital es importante pues, a diferencia de otros festivales, viene a romper con los formatos tradicionales. Es decir que éste, además de contar con la proyección de filmes clasificados en ocho bloques principales, ofrece talleres, mesas redondas, DJ sets, un maratón nocturno de video-artistas contemporáneos y un Foro Internacional de Cineclubes y Desarrollo Comunitario en el que participarán 65 invitados locales y extranjeros, entre los que destacan: el ex Moldy Peach, Adam Green quien por primera vez estará en México dando un concierto acústico y presentando el documental sobre su vida dirigido por Dima Dubson (How To Act Bad), Gabriella Gomez Mont (El hombre que vivió en un zapato), Elisa Eliash (Aquí estoy, aquí no), Xan Aranda (Fever Year), Rania Attieh (Ok, Enough, Goodbye), Héléna Klotz (LÂge atomique), Sergio Castro (A Day With Tortoise) y Rene Daalder, entre otros.
Secciones
Sin duda la sección Cuadrante, dedicada al cine y la música, es la estrella de este año ya que en ella encontramos dos de los títulos más esperados de esta tercera edición. Por un lado el documental francés Je suis venu vous dire (No Comment, 2012) de Pierre Henry Salfati con el cual arranca el festival y, por otro, el clásico Le Voyange dans la Lune (1902) del maestro inventor de los efectos especiales George Méliès. El primero, cuyo título refiera a una canción del famoso cantante Serge Gainsbourg (padre de la también reconocida actriz Charlotte Gainsbourg) trata acerca de la vida del mismo y será exhibido por primera vez fuera de Francia. El segundo nos brinda, una vez más, la historia de seis astrónomos que viajan a la luna para embarcarse en un sinfín de enfrentamientos y aventuras, pero en esta ocasión lo hace en su versión restaurada (presentada el año pasado en Cannes) la cual cuenta con musicalización en vivo del dueto francés Air.
De Australia a Líbano, de Estados Unidos a Filipinas, de Ucrania a Canadá, Topografías recorre todos los continentes para brindarnos producciones internacionales destacadas. Entre las cuales se encuentran: las contraculturales Dragonslayer de Tristan Patterson y Shut Up Little Man! de Matthew Bate, las introspectivas Ukranian Time Machine de Naomi Uman y MOM de Lonely Christopher y la testimonial Il sorriso del capo de Marco Bechis.
Por su parte Meridianos nos ofrece interesantes realizaciones Iberoamericanas, en donde además de historias encontraremos guiños coquetos que aluden a otros creadores. Tal es el caso de La casa Emak Bakia de Oskar Alegría, la cual gira en torno al surrealista Man Ray o la chilena Aquí estoy, aquí no de Elisa Eliash, inspirada libremente en el Vértigo de Hitchock.
Esta vez Archipiélagos estará dedicado a la revisión de la obra completa del holandés Rene Daalder, mientras que Distrito X correrá a cargo de Ricardo Nicolayevksy, el cual expondrá su trabajo en un formato de 108 videos experimentales curados en seis bloques.
En cuanto al cine mexicano, eje protagonista de Distrital, este año viene cargado de una amplia gama de atractivas proyecciones. A través de tres secciones que abarcan estrenos, documentales (Plataforma digital IMCINE) y producciones de ficción lanzadas anteriormente en el interior del país (Perspectivas del cine mexicano) la tercera edición del festival nos permite vislumbrar las principales tendencias nacionales del séptimo arte.
Los títulos emergentes que encontramos son: la fantasiosa historia de El hombre que vivió en un zapato de Gabriella Gómez Mont, La castración de Iván Lowenberg, nostálgico relato de la joven Lourdes, Osiris y El Jarocho de René Peñaloza Galván, retrato del machismo mexicano, Terrafeni de Pablo Chavarría Gutiérrez y Tlatelolco de Lotte Schreiber, el cual resulta una especie de documentación sobre el declive de la utopía arquitectónica de este espacio.
Los documentales, por su parte, nos presentan temáticas que abarcan desde: la cosmovisión que los pastores de la Mixteca tienen en torno a la vida y la muerte en ¿Qué sueñan las cabras? de Jorge Prior, la lucha por la supervivencia en Lecciones para una guerra de Juan Manuel Sepúlveda y la crónica de una derrota en Flor en Otomí de Luisa Riley, hasta el relato de un grupo de cantantes retirados que, contra todo pronóstico, logran resurgir de las sombras en El último bolero de Raúl López Echeverría.
Finalmente los filmes que IMCINE sugiere valdría la pena volver a revisar, incluyen: Otro tipo de música de José Gutiérrez Razura, que, al igual que La mitad del mundo de Jaime Ruiz Ibáñez se centra en la más primitiva de las pasiones humanas: el deseo. Así como De día y de noche de Alejandro Molina, A tiro de piedra de Sebastián Hiriart y Alamar de Pedro González Rubio.
Así pues, con este extenso listado de opciones y actividades, Distrital refuerza la relevancia de explorar las propuestas cinematográficas vanguardistas, nacionales e internacionales, a la par que continúa consolidándose, en la ciudad de México, como uno de los festivales de cine más relevantes de los últimos tiempos.
22.05.12