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Bonito y sabroso, gozar del encuentro de dos países

por Elías Razo Hidalgo

 

Hacer un documental sobre la relación entre Cuba y México puede resultar un tema “fácil y obligado”. Hay tantos enlaces entre ambos países que resultaría “muy cómodo realizarlo”, pero el trabajo Entre Cuba y México, todo es bonito y sabroso (Del Risco, 2015), llevó 20 años, sobre todo por el entramado cultural que se da de ambos países, esto nos lo señala Idalmis del Risco, directora del filme, que fue un estreno que se ha dado en festivales y estamos seguros a final de año dará más de qué hablar.

¿Idalmis, cuándo iniciaste el trabajo, dónde y por qué?

En el 1994, de eso hace 21 años, y empecé a hacer un guión sobre los cubanos emigrados, la emigración cubana y por ahí empecé a escribir el guión y todo eso… Entonces entrevisté a Eliseo Alberto Diego, Lichi, que ya estaba aquí; entrevisté a  René Ruiz, a Salvador Morales, que ya falleció también, con los cassetitos éstos de de tres cuartos de audio.

Así inicié, pero vinieron los doce años de panismo y crearon el famoso discurso de distanciamiento entre Cuba y México, entonces se me hizo muy difícil continuar el documental y al mismo tiempo me di cuenta que las relaciones entre Cuba y México iban más allá de los vaivenes políticos, entonces dije “Esa película va a ser sobre la hermandad cultural de ambos pueblos”, y ya dejé la parte que estaba trabajando sobre la emigración, aunque hay en principio de la cinta la migración histórica, desde Heredia, Martí, Mella, Juárez, que también fue a Cuba, la gesta del Granma que fue aquí, todos sabemos que de la Revolución cubana otra historia hubiera sido si no se gesta desde aquí, desde México… Por ello, la relación que hay entre México y Cuba es entrañable, es algo que viene de las raíces, que viene de la cercanía geográfica pero que también propició el amor, el cariño y el respeto que ha habido entre ambos pueblos.

De ahí viene esta relación de músicos como Beny Moré, Pérez Prado, Rita Montaner, Bola de Nieve, Lecuona, las rumberas, Ninón Sevilla, María Antonieta Pons, Amalia Aguilar, Rosita Fornés, que crearon una forma de ser del cubano y eso se identificaba mucho con México. Por otro lado estaba Jorge Negrete, Pedro Infante, María Félix, Dolores del Río, que su trabajo en el cine perneó en la piel del cubano impactando hasta el día de hoy, que en todas las casas cubanas lo que más se ve es cine mexicano de esta época.

La película es muy emotiva y gozosa, ¿hubo algún otro momento ríspido, difícil, siempre los hay?

No, yo creo que el tema es muy noble, muy amable, desde que se empezó a grabar en Cancún, en Mérida, en Progreso, Campeche, Veracruz, Ciudad del Carmen, Veracruz y DF, en México y La Habana, en Cuba todo fue increíblemente bello porque empezó a fluir solito y los mismo entrevistados me propiciaron otros nombres y me contactaron con otras personalidades, fue una cosa se tuvo que parar porque ya llevaba 80 entrevistados y 120 horas de grabación, me era imposible para 82 minutos que dura el documental y tenía que ponerlos a todos, quedó mucho material de archivo, muchas entrevistas quiero hacer una serie de televisión, hablar de teatro, de música, otros capítulo de hechos históricos comunes, otra de educación y deporte, hay mucho de donde sacar información, para todo da.

El hilo conductor lo tiene Eliseo Alberto Diego y Alejo Carpentier. ¿Por qué escogerlos, por qué darnos este placer de oírlos? A Eliseo no lo vemos, nada más lo oímos, pero a Alejo Carpentier sí lo vemos en material de archivo.

Déjame decirte… La historia de Lichi, de Eliseo Diego, es la base, lo grabé en audio de tres cuartos y luego que empecé a hacer esta otra versión me fui, busqué la grabación, la tenía guardada como en la caja fuerte, escuché esas entrevistas y saqué este recuerdo hermoso de la investigación que me quedó de Lichi, y dije “Es que Lichi va a hacer el hilo conductor de la cinta”, porque Lichi me habla de todo, va recorriendo todos los sectores de la música, el cine, la literatura y todo y dije “Él es el hilo conductor, ya lo tengo aquí”.

Él estaba muy entusiasmado también con esta temática y me apoyó muchísimo, puro audio, porque ya no se pudo hacer tomas en video, por ello sólo aparece su voz a lo largo del documental. Alejo Carpentier, otra personalidad desde la literatura cubana. Para mí siempre, desde que estudié en el Instituto Superior de Artes y Oficios y después en la Escuela Nacional de Artes en La Habana, fue inspirador, él es artífice en mi formación. Alejo Carpentier desde que estudié en el Instituto Superior de Arte, la especialidad de  Dirección, siempre me fascinó, y en el ICAI me dieron el material y por ello hubo posibilidad de aprovecharlo y mira que tesoro se consigue al compaginarlo con el material grabado, mi primer largo metraje en documental.

Otro hilo conductor es sin lugar a dudas la arquitectura de la ciudad de La Habana, con respecto a Campeche, Mérida, sobre todo Veracruz…

Esto fue hermoso, tú viste esta parte con “Adoro, esas calles en donde nos vimos…” de ahí la gente se queda así en el cine, anonadada: Veracruz y Cuba iguales, Veracruz y Cuba y Mérida, Cuba y Campeche idénticas…

¿Qué se hizo primero… las ciudades, la arquitectura…?

Pues primero se hizo Cuba, después Veracruz, se dice en el documental que hicieron uso de la mano de obra mexicanos que llevaron de aquí para allá a construir El Morro de La Habana y cubanos que traían como esclavos también aquí a México a construir San Juan de Ulúa, después es Campeche y posteriormente Mérida, y Mérida… La arquitectura también es un hilo conductor porque Veracruz, Mérida, Campeche son muy igualitas arquitectónicamente a Cuba, y no sólo arquitectónicamente: cuando miras a la gente caminando con ese clima, el bamboleo al caminar, la gracia, ese desenfado que da, yo creo, el calor, que te permite irte quitando la ropa… andar fresco, entonces la gente se parece muchísimo y la gente conversa contigo, te interpela aquí y allá.

En Cuba hay un Barrio de Campeche, se dice en la cinta…

El Barrio de Campeche y todos esos restos que hay, fue coincidente, en un momento de la producción yo estaba en Cuba y en la Habana Vieja estaban rompiendo calles para hacer una tubería y de momento empiezan a encontrar todas esas vasijas y todos esos vestigios de la Pequeña Ciudad de la Habana, de vestigios que venían de Campeche, y entonces tengo a Carpentier diciendo eso mismo de la interrelación con Campeche, y me fui a pedirle a Eusebio Leal, historiador de la Habana, el permiso para tomar esas vasijas y vaya que ilustran la película.

Se ilustra lo que dice Alejo Carpentier décadas atrás, además de ese cuento tan bello que hace de Tata Nacho, donde cuenta que lo lleva a un Benbé y lo desenvolvió con los mátaros, eso es una cosa hermosísima que me fue pasando con el documental y fui descubriendo testimonios, fui descubriendo en entrevistas con personalidades tan importantes como Pablo Milanés y Silvio Rodríguez, Manzanero, Eugenia León que es una maravilla esa bella dama cantante, como se emocionaba hablando de Cuba y de los cubanos y de los pueblos. La entrevista con Fernández Retamar, tan enriquecedoras, con nuestra querida Elenita Poniatwska, con Paco Ignacio II, que está sensacional también, que hace un recuento de estas relaciones, están además Antonio del Conde, el Cuate, Ema Castro Rus, Bernando García el historiador de aquí de Veracruz, de Xalapa, y no sé qué… Todas son personalidades.

¿Dónde se ha exhibido la cinta, en qué festivales va a participar?

Fue al festival de Lima, Perú, y era la primera vez que salía de casa. Estaba yo a la expectativa de qué iba a pasar porque eran peruanos frente a la temática es de Cuba a México: pues fue extraordinaria la aceptación, se vendió todo el boletaje, de ahí nos fuimos a Viña del Mar y otro triunfo y ahora está seleccionada para el 37 Festival Internacional de Nuevo Cine Latinoamericano en Cuba.

Para mi será muy emotivo, porque ahora si vamos a estar en casa con los protagonistas, como aquí en el Cineteca Nacional, y yo tengo la expectativa de que tenga mucha aceptación y de que gane, porque para eso vamos, a ganar, porque yo creo que el documental se lo merece, por su temática, por lo bien editado que está, por lo bien dirigido, hay un buen trabajo de investigación, hay un buen trabajo de edición, de posproducción, el responsable de ello es Luis Kelly y su gente de Verde Espina.

Bueno, ya nada más para concluir… Me llamó mucho la atención Paco Ignacio Taibo II, no lo que dice, lo respeto muchísimo, pero sí me pareció una falta de respeto su promoción política, ¿Por qué se permitió esto, no es una falta de respeto para el documental?

No, él me dijo “Voy a salir como yo quiera”, yo no puedo decirle quítese esto, póngase esto. Pero, no. Hasta ahora eres el primero que me ha dicho algo, nadie se ha molestado, incluso cuidamos mucho la película de no sacar nada de propaganda del PRI, ni del PAN, ni de PRD, ni de Morena, pero ahí estaba porque lo teníamos a él en primer plano su playera, pero yo creo que lo que él dice es tan interesante que se echa de menos que lleve Morena estampada, a mí no me molestó para nada y creo que de verdad eres el primero que me lo dice porque nadie me lo había dicho y creo que no se notará, de verdad.

 

09.11.15

Elías Razo Hidalgo


Periodista de alma que se quedó sin periódico. Atlista aunque gane su equipo. Profesor de la Facultad de Filosofía y Letras desde hace ya 35 años, hoy se divierte en el inframundo de los infomerciales. Miembro emérito del cineclub "José Revueltas" de Ciencias Políticas y Sociales, hoy paga tributo al escritor al....ver perfil
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