por Jorge Luis Tercero Alvizo
La película Cuates de Australia, de Everardo González, a través de avasalladoras imágenes y largos silencios, nos cuestiona y confronta íntimamente, desde su inicio, con un choque de miradas y realidades. “¿Qué tan obligada está la gente que vive en el ejido Cuates de Australia del estado de Coahuila, a quedarse en el territorio?†En alguna presentación, Everardo comentaba al público que durante el rodaje de este documental se filmó demasiado material. El director y su equipo documentaron –a la par que se adentraron en– las costumbres de esta comunidad por cerca de tres años. Al cabo de dicho lapso y al intentar organizar todo el tiempo recopilado en imágenes, el director contaba que ya no sabía por dónde comenzar. Que fue la imagen misma la que los fue guiando a la hora de armar la cinta.